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caiman.de noviembre 2000
argentina: buenos aires

Dos colonienses abren el primer "hotel-pop" de latinoamérica:
Un bastardo llamado "Boquitas Pintadas"

Sábado a la noche en el centro de Buenos Aires. La ciudad está llena de la gente. Por todos lados se escuchan las bocinas de los coches y de los buses, que se empujan por las avenidas de la metrópoli. Chicas en minifaldas al lado de varones con camisa media abierta y pelo engomado con el objetivo de conquistar la noche. Ellos caminan o manejan por Palermo, el barrio más snob, o por Belgrano, por la Recoleta, donde viven los ricos y los famosos, o el barrio colonial San Telmo. Unos de ellos van con rumbo a Montserrat, un barrio viejo residencial situado en el centro de Buenos Aires.



Montserrat – en otros tiempos el lugar de Evita Perón y Yiya Muran
Montserrat, apenas conocido, se encuentra medio dormido al lado de la Avenida Nueve de Julio, una de las avenidas principales de Buenos Aires. Históricamente se trata de uno de los barrios más interesantes de la ciudad. En el siglo XIX, por ejemplo, vivía allí Yiya Murano, una asesina que mataba a sus parientes y amigos con galletitas de cianuro. Al principio de los años 40, lanzó su carrera como actriz la desconocida Eva Duarte. Después se hizo famosa en todo el mundo bajo el nombre de su esposo: Evita Perón – zorra y santa de los argentinos, ella es uno de los mitos más importantes de este país. Más allá de estos sucesos, el barrio nunca llamó demasiado la atención de los porteños, hasta que el 21 de marzo de este año dos alemanes abrieron el "primer hotel-pop de latinoamérica".

Dos colonienses en Buenos Aires
En 1994, Heike Thelen y Gerd Tepass pasaron un año en Buenos Aires y, según sus palabras, se enamoraron de la "magia de esa ciudad". De vuelta en Colonia, empezaron a soñar juntos con un hotel en la metrópoli latinoamericana. Al término de su carrera de Ciencias Regionales de Latinoamérica en Colonia, volvieron para concretar su sueño.

Casi un año buscaron sin éxito hasta que en diciembre se les ofreció una casa en Montserrat. Gastaron 750.000 Marcos Alemanes (375.000 dólares) para la compra y la renovación. Orgullosamente llaman al resultado un "bastardo entre hotel, restorán, bar y club".

el bastardo nunca duerme

"Hotel-super-almacén-artístico" entre chatarra honrada y glamour artístico-pop
Especialmente la generación joven de la ciudad se siente atraída por este lugar. Aquí se encuentran los noctámbulos de todos los tipos tal como pintores, músicos y fotógrafos. El hotel tiene seis habitaciones con cama matrimonial que están amuebladas en un estilo entre "chatarra honrada y glamour artístico-pop”. Los extranjeros habían comprado los objetos de arte popular en los mercados de Buenos Aires antes de que descubrieran la casa para su proyecto. Así se encuentra una combinación de buen gusto que va de antiguas bañeras hechas de hierro colado a mesas de los años sesenta o camas francesas.

Cada habitación se concibe como una obra de arte y el hotel como una galería. La definición que encuentran los dos hoteleros teutones es el hotel como "hotel-super-almacén-artístico”. Además, con poco dinero, se puede comprar partes de la decoración - del armario hasta el cenicero. Cada tres meses cambia la ambientación de las habitaciones y una gran parte de la casa seguido por exitantes y ruidosas vernissages para festejar estos eventos.


el salón greta-garbo
Lleva el título de la primera novela pop latinoamericana
Bautizaron a su bastardo bajo el nombre de "Boquitas Pintadas”, como homenaje a Manuel Puig, cuya obra del mismo nombre se considera la primera novela pop latinoamericana. "El nombre expresa tanto lo glamouroso como lo grasa”, afirman. "Y estimula tanto al cerebro como a los oídos.” A parte, se entiende fácilmente y por eso fue recomendable como nombre para el primer hotel pop latinoamericano.

Los dos neo-porteños caracterizan el diseño del bastardo maquillado como "una mezcla entre minimalismo y exageración modesta”:
La barra sirve a la vez como recepción del hotel, el check-in se realiza allí mismo y el camarero vuelve a ser recepcionista. Si hace buen tiempo el café se traslada a la calle y se puede tomar el té en la terraza hawuaiana de manera tradicional. Los huéspedes gozan de sus cócteles en el "bar nocturno” que se encuentra en el sótano. A partir de la medianoche, se trasforma en el club de la casa. Los DJs cambian diariamente.

Todas las habitaciones están equipados con baño, balcón y aire acondicionado, TV/Video, HighFidelity SoundSystem, teléfono y acceso al Internet. Precio por noche: entre 65-140 pesos (1 peso argentino equivale a 1 dólar estadounidense). Usando un ascensor con cierto toque barroco se llega a las habitaciones. Como extra el hotel provee una pequeña pileta en la azotea, una biblioteca pequeña y un salón que, en homenaje a la gran diva de los años cuarenta, se llama Salón Greta Garbo.


el bastardo sirve como
escenario de foto-shootings
Servicio a lo grande
Como en los grandes hoteles, las 24 horas al dia no les hace falta nada a los huéspedes. El personal se ocupa de las confirmaciones de vuelos, tal como de la elaboración de viajes individuales por toda la Argentina.

Además hay recomendaciones actualizadas diariamente con respecto a eventos artísticos, culturales y nocturnos de la capital así como direcciones de escuelas de lengua y de salones y maestros de tango. Para los muy curiosos el hotel provee una lista de las atracciones más raras e inverosímiles de Buenos Aires. A parte siempre están bien informados de los programas de los clubs y de los menúes de los restoranes.
pa`rriba


Algo mágico
Boquitas Pintadas no sólo atrae a numerosos huéspedes que visitan su hotel, bar, restorán, café o club. Precisamente fotógrafos profesionales se han enamorado de este lugar, pues les sirve como escenario de foto-shootings. Y también los miembros de la movida porteña gozan de esta oportunidad singular de emplear plenamente su creatividad en las habitaciones.

Parece que el bastardo colorido con las boquitas pintadas está irradiando algo mágico para muchos porteños. El concepto del "hotel-super-almacén-artístico” con su chatarra honrada y glamour artístico-pop, su diseño y su ambientación reflejan la inspiración que Heike y Gerd han encontrado para sí mismos en la metrópoli porteña.

Texto: Lars Borchert

Contacto:
Heike Thelen - Gerd Tepass

pop hotel boquitas pintadas
ee.uu.1393
1101 buenos aires
telfax (+54 11) 4381 6064
email:
pop-hotel@boquitas-pintadas.com.ar
Internet: www.boquitas-pintadas.com.ar

Links:
www.buenosaliens.com.ar
www.wipe.com.ar

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