[art_1]
España: Cáceres - un Museo de la Edad Media y Patrimonio Universal
Cáceres, la metrópoli secreta de la Extremadura (con sólo 80.000 habitantes más bien una metrópolicita) hoy día es un importante centro cultural y universitario y desde el año 1986 también Patrimonio Universal declarado por la UNESCO. Cáceres fue fundada en el año 78 d.C. como campamento romano nombrado Castra Caecilia, el que en el año 35 d.C. se convirtió en la ciudad Colonia Norba Caesarina. Cuando en el Siglo VIII los árabes conquistaron Cáceres, la denominaron Hizn Qazris. Mientras que durante la época árabe fue una ciudad de poca importancia, después de que los Almoravides y Almohades se hayan apoderado de Cáceres en los Siglos XI y XII, llegó a ser un centro de comercio y cultura en el oeste de la península ibérica.
Durante el Siglo XII, debido a las guerras de la Reconquista, Cáceres cambió varias veces de dueño entre los Califas almohades que tenían sus residencias en Sevilla y Marrakech y los Reyes de León y Castilla, hasta que en el año 1229 el Rey Alfonso IX. logró conquistar la ciudad definitivamente para su reino.
De la época anterior a la Reconquista datan las murallas almohades y la monumental Torre de Bujaco. El nombre de la torre se deriva del nombre del Califa Abu Yakub, el que reconquistó Cáceres por última vez para los Almohades y luego mandó decapitar a los caballeros cristianos que habían defendido la torre hasta el final. Aquellos por lo menos podían disfrutar de unas vistas magníficas en el momento antes de su ejecución, ante sus miradas se extendía el paisaje de horizontes infinitos de la Extremadura. Hoy día se puede contemplar la bella Plaza Mayor de Cáceres desde lo alto de la torre.
Cuando hoy día cruzamos la blanca Plaza Mayor construida en el Siglo XVI (hacia 1577) y atravesamos el Arco de la Estrella, entramos en un mundo diferente, rodeado por las murallas de origen almohade. Nos adentramos en un laberinto silencioso y misterioso de altos muros cuyas sombras tenebrosas invaden las callejas y enmarcan un escenario medieval dominado por 15 torres de palacios de la aristocracia, construidos durante los Siglos XIII hasta XVI. Hubo muchas más de esas torres, pero en el año 1479 la Reina Isabel la Católica de Castilla mandó derribar las torres de todas las familias de la nobleza que se habían mostrado contrarias a ella durante su lucha por la Corona de Castilla. De esta manera, su humillación a modo de castigo quedaba pública. Actualmente la torre profana más alta de Cáceres es la de la Casa de las Cigüeñas. Era propiedad del noble Diego de Ovando, partidario de Isabel quien sabía que la Reina ávida de poder no estaba para bromas.
Durante el Siglo XVI, gracias a la riqueza inesperada traida por aquellos que habían cruzado el Atlántico para explorar el Nuevo Mundo como pobres diablos y luego regresaron con plata y oro, criados y esposas indígenas de América, el conjunto medieval de edificios almohades y góticos de Cáceres se iba completando por elementos platerescos y construcciones renacentistas. La Catedral gótica de Santa María la decoraron con un magnífico retablo mayor renacentista de madera de cedro y borne, creado por el escultor Roque Balduque hacia 1551.
Y los palacios medievales como la Casa de los Golfines, Casa de los Sande y Casa de las Veletas (la que alberga hoy el Museo Arqueológico) fueron decorados con balcones, escudos y portales platerescos. También construyeron nuevos palacios enteros en estilo renacentista. El más monumental lleva el nombre orgulloso Palacio de los (Toledo-)Moctezuma. Su dueño fue un Conquistador, el que se casó con una princesa azteca y la trajo a Cáceres (la hija de Moctezuma II.). Hoy su palacio alberga el Archivo Histórico.
No sólo los innumerables nidos de cigüeñas, sino también plantas espectaculares completan el conjunto histórico del Patrimonio Universal de Cáceres. Impresionantes se presentan la gótica Torre de los Sande, completamente cubierta de hiedra, la "avalancha" de Bougainvillea al lado del Arco de la Estrella o la inmensa haya roja al lado del Jardín de Doña Ulloa. Muy recomendable resulta una subida a la torre de la catedral y a las torres de la barroca Iglesia de los Jesuitas San Francisco Javier. La altura de esas torres sacras es casi lo doble de la Torre de Bujaco, así que las vistas desde allí arriba a todo el casco antiguo y los campos delante de las murallas son espectaculares. Pero con cuidado - las campanas tocan cada media hora y estando directamente debajo, su toque puede ser tremendamente ruidoso, parece vibrar toda la torre y puede causar un buen susto.
El templo de la Compañía de Jesús del Siglo XVIII con sus dos torres y sus retablos dorados es uno de los pocos edificios "modernos" dentro del conjunto medieval de Cáceres y alberga hoy una exposición interesante (y bastante crítica) acerca de la historia eclesiástica.
Una visita de Cáceres es como un viaje por el tiempo y revela impresiones de un mundo olvidado y remoto de caballeros y conquistadores, en el que nada hace recordar la modernidad. En caso de que algún visitante se ponga demasiado melancólico errando por ese laberinto lúgubre a la sombra de torres macizos, puede volver en tres minutos a la blanca Plaza Mayor inundada de luz, desde el Siglo XVI el salón de estar de Cáceres, donde muchas generaciones ya han podido disfrutar de las delicias de la Extremadura: jamones y secretos del cerdo ibérico que se nutre de bellotas, truchas del Río Jerte, pasteles de cerezas. Muy recomendable también, sobre todo a la hora del atardecer y de la puesta del sol (o incluso de noche) es una excursión a La Montaña (poco más de 1 Kilómetro al sudeste de Cáceres).
Desde la colina donde se encuentra una Capilla de peregrinación muy popular hay unas vistas magníficas al océano de luz de Cáceres y los horizontes infinitos del paisaje extremeño. Además, se puede entrar en el bar de "Miguel" (Restaurante con terraza y trato muy amable). También los peregrinos que caminan a Santiago por la Vía de la Plata y pasan por Cáceres deberían subir aquí. Llegando a Cáceres un tercio del Camino a Santiago ya queda atrás y vale la pena descansar en esta bella ciudad incluso más de un día.
Texto + Fotos: Berthold Volberg
Recomendaciones y Enlaces:
Alojamiento en Cáceres:
NH Palacio de Oquendo (Hotel de 4 estrellas), Plaza San Juan 11, 10003 Cáceres, teléfono:+34 927 21 58 00
http://www.nh-collection.com/es/hotel/nh-collection-caceres-palacio-de-oquendo
Hotel instalado en un Palacio renacentista con bello Patio, ambiente aristocrático y buen restaurante
Gastronomía en Cáceres:
Los restaurantes y bares de tapas en la Plaza Mayor ofrecen las especialidades de la región, pero no son baratos, en las mesas de la terraza también se paga las vistas de la Plaza Mayor. Pero en el recinto medieval amurallado los restaurantes y bares tienden a ser aún más caros.
El mejor Restaurante en la Plaza Mayor, con una cocina más moderna e innovadora, buen menú de día a buen precio y con gran selección de vinos exquisitos y muchas tapas que llevan el mejor queso de España (la famosa Torta del Casar) de la provincia de Cáceres:
Tel.: 927 24 54 97
info@restaurantecayena.com
También muy recomendable: Mesón San Juan, en la bonita Plaza de San Juan, al lado del Hotel Palacio de Oquendo, ofrece las típicas especialidades de la Extremadura (platos del cerdo ibérico) y vinos de la región como el tinto legendario "Habla del Silencio", Tel. 927-626648
Monumentos:
Catedral Santa María: horario 10.00 hasta 12.00 y 13.00 hasta 19.30 horas, Entrada incluida subida de la torre: 1 Euro
Iglesia de los Jesuitas San Francisco Javier: horario 10.00 hasta 14.00 horas y 16.30 hasta 19.30 horas (durante verano de 17.00 hasta 20.00 horas), Entrada incluida subida de la torres: 1 Euro
Casa de las Veletas / Museo Arqueológico: horario martes - sábado 9.00 - 14.30 y 16.00 - 19.00 horas (durante el verano 17 - 20 horas), lunes cerrado, domingo 10.15 - 14.30 horas, Entrada libre
[print version] / [archivo: españa]
